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Cada vez estamos más apegados a nuestros teléfonos: tenemos la prueba

Cada vez estamos más apegados a nuestros teléfonos: tenemos la prueba

Cuando el reloj marca las 7:30 a. m., una melodía muy familiar empieza a sonar. Es la alarma de tu teléfono.

Te apresuras a apagarla y respiras con alivio una vez que oyes el silencio. Con el teléfono ya en tus manos, comienzas a revisar tus correos electrónicos.

Después de responder algunos mensajes urgentes, te das el gusto de visitar tus redes sociales: Twitter, Facebook, Instagram, todo el combo.

Y solo es la rutina al despertarte. ¡Imagina todas las formas en que usas el teléfono en el transcurso del día!

Para salir del plano de la imaginación y obtener respuestas concretas, preguntamos a 412 personas en SurveyMonkey Audience sobre las formas en que usan sus teléfonos y cómo actúan con ellos.

Esto es lo que nos dijeron, después de responder mensajes de texto y antes de abrir Snapchat:

Usa SurveyMonkey Audience para probar ideas con tu mercado objetivo. 

¿Para qué usan en realidad las personas sus teléfonos todos los días?

  • Mensajes de texto (el 87 %)
  • Correos electrónicos (el 76 %)
  • Alarma (el 76 %)
  • Redes sociales (el 64 %)
  • Leer blogs y noticias (el 60 %)
  • Comprar (el 57 %)
  • Escuchar música (el 56 %)

Con un conjunto tan diverso de usos, es fácil comprender cómo las ventas de computadoras portátiles han bajado, y cómo las librerías y los centros comerciales también son menos frecuentados.

¿Continuará la tendencia de usar el teléfono para casi todo? Es lo más probable. Los adultos jóvenes (de 18 a 29 años) son quienes usan sus teléfonos con más frecuencia en cada uno de los casos anteriores. Además, los adultos jóvenes son quienes tienen mayor tendencia a usar sus teléfonos para hacer operaciones bancarias en línea (el 72 %), jugar un videojuego (el 65 %), responder una encuesta (el 55 %) y mirar un programa o una película (el 50 %).

Los comandos por voz se han vuelto populares. Casi la mitad de los propietarios de teléfonos usan esta función, pero el verdadero elemento sorpresa es la frecuencia y la forma en que se está usando.

Observamos que el 45 % de las personas usa comandos por voz al menos una vez a la semana y el 16 % al menos una vez al día. Los hombres y los adultos jóvenes tienen incluso más tendencia a usar esta función: el 66 % y el 57 % respectivamente lo utiliza al menos una vez por semana.

Los comandos por voz se utilizan de maneras muy diversas. Estos son algunos de los usos más comunes:

  • Mensajes de texto (el 54 %)
  • Búsquedas en la web (el 53 %)
  • Llamados telefónicas (el 49 %)

¿Duermes con el teléfono cerca de la cama? Hemos descubierto que la mayoría de las personas sí.

También hemos descubierto que la actividad más popular de las personas al despertar es revisar el teléfono; le siguen cepillarse los dientes y tomar café.

Es especialmente popular como primera actividad en la mañana para aquellos que utilizan una aplicación de entrenamiento en su teléfono (el 58 %) o para quienes son adultos jóvenes (el 65 %). ¿Y los adultos jóvenes que utilizan una aplicación de entrenamiento? El número se eleva al 75 %.

Tarde o temprano, tu teléfono caerá al suelo. Puede que se te caiga en la acera, en el sillón o, si realmente tienes mala suerte, en el inodoro.  

Dado que el teléfono sufre a menudo roturas cuando se cae, la mayoría de los propietarios de teléfonos invierte en protegerlos. Alrededor del 66 % de nuestros encuestados adquiere una cubierta. Los adultos jóvenes actúan con especial cautela, ya que el 73 % compra una.

¿Hasta dónde estás dispuesto a llegar para evitar perder tu teléfono?

Por ejemplo, supongamos que estás en la plataforma del tren y una ráfaga de viento hace que sueltes el teléfono y que caiga a las vías.

¿Saltarías de inmediato para recogerlo? ¿Buscarías a un oficial de policía para que lo recupere? ¿O te resignarías a abandonarlo?

Cuando les presentamos esta situación a nuestros encuestados, la primera opción fue la más elegida (el 39 %). El hecho de estar dispuestos a poner en riesgo nuestra salud para proteger nuestro teléfono revela que es una de nuestras posesiones más preciadas.

Para muchos de nosotros, nuestro teléfono es todo. Nos despierta, nos da las noticias, nos permite hacer compras y nos ayuda a comunicarnos con otras personas. La posibilidad de perderlo nos lleva a invertir más dinero y a actuar de formas que normalmente no haríamos.

Esto es todo por ahora. Puedes darles un descanso a tus ojos en caso de que estés leyendo este artículo en tu teléfono.