Lisa trabaja en Recursos Humanos en Widgets, Inc. Recientemente, ha escuchado rumores de que los empleados no están satisfechos con sus supervisores, pero no sabe por qué. Decidida a averiguar qué es lo que ocurre, organiza reuniones individuales con cada uno de los empleados. Lamentablemente, las reuniones no resultan útiles porque ninguna persona está dispuesta a decir de manera pública algo negativo sobre su supervisor.
Llena de frustración, Lisa decide enviar una encuesta con la esperanza de que el anonimato haga que los empleados se sientan más cómodos al compartir lo que de verdad piensan. Así empieza a crear su encuesta, pero se siente un poco estancada y abrumada.
¿Quieres recopilar feedback cuantitativo y cualitativo?
Crea una encuesta con preguntas abiertas y cerradas para que puedas recopilar un conjunto de datos diverso.
De acuerdo, piensa Lisa, comencemos con los aspectos básicos.
A este tipo de pregunta se le conoce como pregunta “abierta” o “cualitativa”. Se le denomina “abierta” porque la persona que responde es libre de responder de la manera que desee. No se especifican opciones de respuesta.
Se le llama “cualitativa” porque las respuestas se evalúan y se miden por los sentimientos más que por los números.
Ansiosa de que su encuesta tenga éxito, Lisa piensa en cómo respondería esta pregunta sobre su propio supervisor:
Lo bueno de las preguntas abiertas o cualitativas es que si Lisa no tiene idea de por qué las personas están molestas con sus supervisores, este tipo de preguntas les da rienda suelta para responder. Por ejemplo, es probable que a Lisa no se le haya ocurrido preguntar específicamente si los supervisores fomentan el equilibrio entre el trabajo y la vida personal, pero esto podría surgir como un tema entre las respuestas.
No obstante, las preguntas cualitativas abiertas presentan algunos problemas:
1. ¿A qué te refieres con eso? Las preguntas cualitativas pueden ser vagas. ¿Qué opino de mi supervisor? ¿Te refieres a su estilo de gestión? ¿A su sentido de la moda? ¿Su puntualidad? ¿Sus acreditaciones? Reformular las preguntas abiertas para hacerlas más específicas puede ayudarte. Por ejemplo: Describe el estilo de gestión de tu supervisor.
Sin embargo, las preguntas aún pueden ser confusas si no se proporcionan respuestas específicas. Sería mucho más sencillo responder la siguiente pregunta sobre el estilo de gestión de los supervisores:
A este tipo de pregunta se le conoce como pregunta de “respuesta cerrada” o “cuantitativa”. Se le llama “cerrada” porque el rango de opciones de respuesta que tienen para elegir los encuestados es limitado. Se conoce como “cuantitativa” porque las opciones de respuesta se pueden convertir en números. ¿Y por qué esto es importante?
2. ¿Qué debo hacer con todos estos datos? Es difícil saber qué preguntas hacer, pero saber qué hacer con las respuestas que obtienes puede ser aún más difícil. Con las preguntas cualitativas, debes leer todas las respuestas detenidamente para poder extraer los temas comunes. Sin embargo, este proceso puede estar plagado de sesgos, pues a menudo solo vemos lo que queremos ver en las respuestas abiertas. ¡Por eso las preguntas cuantitativas pueden ser tan importantes!
Todo lo que tienes que hacer es una sencilla operación en una hoja de cálculo para sacar un promedio de las respuestas que obtengas. Así no invertirás horas en leer respuestas. Esto también permite hacer análisis más complejos (como comparaciones de grupos) a gran velocidad. Simplemente calcula un promedio para cada grupo, compáralos y listo.
3. ¿Qué más puedo obtener? Otra cosa que debes saber sobre las preguntas cualitativas es que toma mucho tiempo responderlas. Desde la perspectiva de los encuestados, es mucho más rápido elegir una de las cinco opciones formuladas previamente en lugar de tener que tomarte el tiempo para escribir tu propia respuesta. Además, como lo mencionamos antes, redactar encuestas breves mantiene a los encuestados concentrados e interesados. Por lo tanto, no solo podrás hacer más preguntas cuando uses preguntas cuantitativas, sino que también obtendrás mejores datos. Obtener los datos más precisos posibles significa que siempre tomarás la decisión correcta.
Entonces, ¿cuál es la conclusión? Las preguntas cualitativas son un increíble primer paso para explorar las mentes de las personas a las que quieres encuestar, pero no deberían ser el último. Usar preguntas cuantitativas hace que las preguntas sean más claras, que el análisis sea más sencillo y que la calidad de los datos sea mejor.
Dedica tiempo a pensar qué preguntas cuantitativas específicas puedes hacer. Créenos, te alegrará haberlo hecho. En cuanto a Lisa, tenemos la esperanza de que haya determinado las preguntas cuantitativas adecuadas que debe hacer para obtener las respuestas que necesita.