¿Los datos obtenidos en las investigaciones son siempre objetivos? En un mundo ideal, sí. Sin embargo, si no tienes cuidado, también puedes alterarlos o alterar la confiabilidad y el valor de las respuestas de tus encuestas, además de interpretar erróneamente los datos.
¿A qué se debe todo esto? Una de las razones más importantes son los sesgos, es decir, atajos mentales que hemos desarrollado los seres humanos para poder tomar decisiones de manera más rápida y eficaz en nuestro día a día.
Sabemos que no quieres introducir sesgos en las investigaciones, puesto que afectan la calidad y el valor de la información que necesitas para tomar decisiones objetivas para tu empresa.
En esta ocasión nos centramos en los sesgos qué más afectan el mundo de las encuestas y en cómo podemos evitarlos para que puedas tomar decisiones objetivas, fiables y útiles para tu empresa.
La Real Academia Española define sesgo como un “error sistemático en el que se puede incurrir cuando al hacer muestreos o ensayos se seleccionan o favorecen unas respuestas frente a otras”.
Asimismo, los sesgos se van desarrollando internamente en función de nuestras experiencias pasadas, preconceptos e ideas preestablecidas. Por esto, es importante saber reconocerlos y tenerlos en cuenta a fin de evitar alterar la información que obtenemos de los grupos de participantes en las investigaciones y encuestas.
Saber reconocer los sesgos es de gran utilidad para evitar obtener respuestas que no sean útiles para tu investigación, ya que estos pueden estar presentes desde el momento del diseño y planeamiento de la investigación hasta el desarrollo y el posterior análisis de los resultados.
Los sesgos (en especial los sesgos cognitivos) pueden afectar la forma en que administramos las encuestas, formulamos las preguntas o interpretamos los datos de nuestra investigación. Por ello, tenemos que prestarles atención porque, de lo contrario, podrían alterar la calidad de los datos y, por lo tanto, la información obtenida.
Lo que en definitiva se traduce en que no sabrás qué decisiones tomar para el futuro de tu empresa o, lo que es peor, tomarás el rumbo equivocado.
Por lo tanto, evitar los sesgos es de vital importancia a la hora de realizar tus encuestas para obtener información completa, precisa y detallada que te permita tomar decisiones informadas para tu empresa.
Como te podrás imaginar hay distintos tipos de sesgo en la investigación, pero en esta ocasión nos centraremos en los más importantes. Dividiremos los sesgos en dos grandes grupos para facilitar su comprensión: los sesgos del investigador y los sesgos del encuestado.
Cada uno de ellos presenta sus propias dificultades, pero no creas que es imposible evitarlos. Con el tiempo podrás ser más consciente de estos y podrás reducir así la posibilidad de introducirlos en tus investigaciones o encuestas.
Los sesgos del investigador, como su nombre lo indica, son aquellos errores que se pueden introducir en la investigación a la hora de recabar información, analizar e interpretar los resultados. Los sesgos más comunes son el sesgo de muestreo, el sesgo de confirmación, el sesgo de anclaje y el sesgo implícito (también conocido como sesgo inconsciente).
El sesgo de muestreo (también llamado sesgo muestral o sesgo de selección) se da cuando la persona que lleva a cabo la investigación incluye o excluye a ciertos grupos demográficos que van en contra de sus hipótesis o intereses.
Un ejemplo de sesgo de muestreo sería que el creativo de una agencia de marketing decida lanzar una nueva campaña a pesar de que los datos de su investigación de mercado demuestran que no sería exitosa entre su público objetivo. Así, el creativo podría decidir enviar la encuesta a sus amigos o personas que sabe de antemano que lo apoyarán.
Consejo: Evita el sesgo de muestreo seleccionando una muestra más diversa y que se ajuste a los objetivos de tu encuesta. Puedes lograrlo eligiendo a grupos de participantes de forma aleatoria.
Con SurveyMonkey Audience tienes acceso a panelistas de todo el mundo, lo que te permitirá obtener respuestas objetivas para tus encuestas al instante y de manera intuitiva.
Los sesgos de confirmación se introducen cuando la persona que realiza la investigación solo acepta los datos que confirman su hipótesis, creencias u objetivos, mientras que desacredita o casi no considera los resultados que van en contra de estos.
Un ejemplo de sesgo de confirmación bastante común es lo que ocurre en la política. Las personas suelen favorecer las posturas y decisiones de aquellas figuras políticas que apoyan y desacreditan casi rotundamente los argumentos de la posición contraria, aun cuando haya evidencia contradictoria.
Consejo: Para evitar el sesgo de confirmación, se recomienda que recopiles información de una muestra amplia y representativa. Si necesitas ayuda para calcular el tamaño ideal de tu muestra, puedes utilizar nuestra calculadora del tamaño de muestra.
Los sesgos implícitos o sesgos inconscientes se manifiestan en el trato favorable o desfavorable hacia cierto grupo de personas de forma involuntaria debido a su género, etnia, nivel de ingresos económicos, nivel educativo, etc., y se deben a los estereotipos que tenemos de las personas.
Consejo: Una buena forma de evitar los sesgos implícitos es saber reconocerlos en el momento y escuchando activamente una pluralidad de opiniones a fin de evitar los estereotipos hacia la gente. Es recomendable evitar hacer suposiciones con la información limitada que tenemos de las personas.
Los sesgos de anclaje se suelen presentar en las investigaciones cuando la persona que las realiza se deja llevar por los resultados obtenidos inicialmente, y, con base en esos resultados limitados, toma una decisión. Por consiguiente, el investigador o investigadora puede dejar de lado los demás datos posteriores.
Consejo: Para evitar el sesgo de anclaje es recomendable llevar a cabo investigaciones exhaustivas y tomar decisiones una vez que se haya estudiado la totalidad de los datos obtenidos, sin importar que estén a favor de tu hipótesis inicial o no.
Se podría decir que este sesgo es una consecuencia de los mencionados anteriormente. Formular las preguntas correctas para tu encuesta puede parecer una tarea fácil a simple vista, y, en parte, lo es, y no tiene que ser complicado. No obstante, si no seguimos unas buenas prácticas a la hora de formular las preguntas, podemos introducir involuntariamente sesgos en ellas que, sin lugar a dudas, afectarán la calidad de las respuestas o lo que responden las personas encuestadas.
Consejo: Evita las preguntas sesgadas, tendenciosas, compuestas o absolutas en las encuestas.
Los sesgos de los encuestados son aquellos que introducen las personas voluntaria o involuntariamente a la hora de responder las encuestas. Los sesgos más frecuentes son los siguientes:
El sesgo de no respuesta, también conocido como sesgo de falta de respuesta, se da cuando las personas encuestadas deciden no responder toda la encuesta. Las razones pueden ir desde el diseño de la encuesta hasta cuestiones de índole personal, como la confidencialidad de los datos personales.
Consejo: Puedes evitar los errores por falta de respuesta prestando atención al diseño de las encuestas y viendo las medidas que puedes tomar, como garantizar la confidencialidad de los datos recopilados, ofrecer incentivos o hacer pruebas de que funcionen correctamente en todos los dispositivos. Además SurveyMonkey Genius te puede ayudar a detectar errores en tu encuesta. Además de proporcionarte algunas recomendaciones.
Los sesgos de conformidad se cuelan en las investigaciones cuando los y las participantes responden de forma moral o socialmente aceptable a fin de evitar críticas.
Consejo: Para evitar caer en el sesgo de conformidad, se recomienda garantizar el anonimato de los datos obtenidos y proporcionar a los encuestados un espacio cómodo y ameno en donde puedan responder con sinceridad. Esta es la única forma de obtener datos y percepciones honestas.
Sesgos del entrevistador | Sesgos del encuestado |
- Sesgo de confirmación - Sesgo de anclaje - Sesgo de muestreo - Sesgo implícito - Sesgo en la formulación de preguntas | - Sesgo de falta de respuesta - Sesgo de conformidad |
Los sesgos inconscientes se pueden evitar informándose continuamente sobre el tema. Así que la educación es clave. Asimismo, es fundamental evitar los estereotipos y suposiciones sobre las personas.
En los casos del sesgo de confirmación y de conformidad, resulta necesario, por un lado, llevar a cabo investigaciones exhaustivas y pensar críticamente para no dejarse llevar por los datos recopilados que se ajustan a nuestros objetivos; y, por otro lado, brindar un ambiente cómodo para que las personas encuestadas puedan dar opiniones honestas.
Puede que ahora te parezca que hemos visto mucha información, pero con el paso del tiempo te irás sintiendo más y más a gusto a la hora de hacer tus encuestas e irás aprendiendo las formas de evitar los sesgos cognitivos y otros tipos de sesgos que pueden entorpecer la fiabilidad de tus resultados.
En SurveyMonkey tenemos plantillas de encuestas sobre empleados y recursos humanos, educación y escuelas, política y opinión pública, marketing e investigación de mercado, entre otras. Nuestras preguntas formuladas por expertos te permitirán reducir el sesgo en las encuestas y obtener datos de calidad que te permitan tomar el mejor rumbo para tu empresa u organización. Comienza a utilizar SurveyMonkey hoy.
Los sesgos son atajos mentales que desarrollamos para tomar decisiones de forma rápida y eficaz. Nos permiten ahorrar tiempo y tomar decisiones de forma casi automática. La desventaja de los sesgos en la investigación es que pueden alterar la calidad de los resultados de las encuestas y las investigaciones, ya que la objetividad se ve comprometida. Esto último afecta negativamente la toma de decisiones de las empresas.
Los sesgos cognitivos son impulsores inconscientes que nos permiten tomar decisiones de forma rápida a partir de experiencias pasadas, suposiciones y estereotipos, pero pueden dar lugar a análisis erróneos de determinadas situaciones o, incluso, llevarnos a actuar de manera irracional.
Los tipos de sesgos más frecuentes son los sesgos de conformidad, los sesgos de anclaje, los sesgos de confirmación y los sesgos implícitos.
Todas las personas tenemos inevitablemente sesgos, ya que estos son producto de la evolución humana y nos permiten ahorrar tiempo en la toma de decisiones. Sin embargo, los podemos evitar a través de la educación para no caer en estereotipos o suposiciones falsas.
El sesgo en las investigaciones ocurre cuando el investigador o encuestado toma decisiones de manera sistemática y errónea que afectan la calidad y la fiabilidad de las respuestas obtenidas. De esta forma, no se puede llegar a conclusiones o resultados que sean útiles para la toma de decisiones de la empresa u organización.
Los sesgos más frecuentes en las investigaciones son los sesgos de confirmación, los sesgos inconscientes, los sesgos de anclaje y los sesgos de muestreo.
Para evitar los sesgos en una investigación es necesario contar con un pensamiento crítico que permita reconocerlos y actuar en consecuencia, y también evitar tomar decisiones a partir de datos incompletos o elegidos en función de los intereses propios.